Esta noche no quiero ir a la cama.
El ritual instintivo de pasear la punta de mi nariz por las sábanas en busca de tu rastro se me atraviesa en los medios. No quiero reconocerte en olores y no encontrar albergue para mis manos.
Alargo el tiempo en busca de un sueño que, lo sé de antemano, será corto, sucio y oscuro.
Mi tendencia al caos se exacerba. Desbordo márgenes y me salto a la torera biorritmos y conductas de sentido común. Desordeno las letras de tu nombre y busco cómo adormecer esta adolescencia tardía que nos coloca en el sitio que no es.
Quizá un discurso con las leyes de la termodinámica por argumento fundamental nos definiría como sistema, con un funcionamiento perfectamente estudiado y, en principio, previsible. Y yo siempre sería la beneficiada. Al fin y al cabo, mi temperatura de lagartija de diciembre me garantizaría ganar siempre.
Cuando necesito un discurso exacto como una fórmula física es cuando me encuentro con una competencia verbal francamente lamentable. Y mi conocimiento de la termodinámica tampoco da como para un ensayo...
En todo caso, asumiendo mi tendencia entrópica, siempre me consuela saber que la tercera ley no permitirá que me congele.
No del todo.
Total... que cada vez que te vas es como un arañazo, un padrastro, un orzuelillo. Un momento, pero jode que no sabes ni te enteras. Un momento, un breve espacio, un mínimo paréntesis que me descangalla el chiringo y me pone a parir.
Ahora creo que sí que me he entendido.
El ritual instintivo de pasear la punta de mi nariz por las sábanas en busca de tu rastro se me atraviesa en los medios. No quiero reconocerte en olores y no encontrar albergue para mis manos.
Alargo el tiempo en busca de un sueño que, lo sé de antemano, será corto, sucio y oscuro.
Mi tendencia al caos se exacerba. Desbordo márgenes y me salto a la torera biorritmos y conductas de sentido común. Desordeno las letras de tu nombre y busco cómo adormecer esta adolescencia tardía que nos coloca en el sitio que no es.
Quizá un discurso con las leyes de la termodinámica por argumento fundamental nos definiría como sistema, con un funcionamiento perfectamente estudiado y, en principio, previsible. Y yo siempre sería la beneficiada. Al fin y al cabo, mi temperatura de lagartija de diciembre me garantizaría ganar siempre.
Cuando necesito un discurso exacto como una fórmula física es cuando me encuentro con una competencia verbal francamente lamentable. Y mi conocimiento de la termodinámica tampoco da como para un ensayo...
En todo caso, asumiendo mi tendencia entrópica, siempre me consuela saber que la tercera ley no permitirá que me congele.
No del todo.
Total... que cada vez que te vas es como un arañazo, un padrastro, un orzuelillo. Un momento, pero jode que no sabes ni te enteras. Un momento, un breve espacio, un mínimo paréntesis que me descangalla el chiringo y me pone a parir.
Ahora creo que sí que me he entendido.
9 comentarios:
Ay, Tormentito. En mi casa se dejaron una camiseta, el olor de las sábanas desapareció porque hace 22 días que se fue, y la camiseta no he vuelto a olerla, porque aún me quedan cinco semanas...
Tampoco me descangalla, no todavía, pero quizá llegue a sentir eso y será adolescente, otra vez, y jodido, de nuevo.
Qué puta es la distancia.
Lo que más me mola de tu texto es el final.
Si has llegado a entenderte, ya es mucho. Yo, a veces, no sé ni quien soy.
Besicos,
Rectifico.
Sí que sé quien soy, pero no sé qué es lo que hago.
P'al caso, lo mismo.
Más besos,
Sí, si que te entiendes, siempre. Divagamos sobre suelo firme, porque lo que nos gusta es rompernos la cabeza, exprimir la vida, y analizarlo todo en busca de mas...
Se lo que es el olor de alguien, y su ausencia física frente a ese olor que parece nos lo va a devolver de un momento a otro... Porque lo se, espero no volverlo a pasar, ni aunque sea un ratito. Aunque me da a mi que me queda mucho por pasar todavía...
Un beso fuerte, hermosa, me encanta leerte, como siempre¡
Ah, que no vengo por falta de tiempo, no por falta de ganas¡
Me ha gustado eso de "lagartija de diciembre". Vamos... que tu equilibrio termodinámico se acerca a la perfección de la hibernación.
Y por qué será que no termino de creerlo (con risas).
Un abrazo.
Trata de buscar el lado positivo, Tormento: con esa temperatura siempre podrás mantener las cervezas bien frías :P
Mucho ánimo, en cualquier caso. Y paciencia, y sabiduría. Besos!
¿Hace falta que te diga que además de que tú te entiendas, yo también te entiendo perfectamente? No, no hace falta, lo sabes de sobra.
Sin embargo, hay algo que no entiendo: lo de la temperatura de lagartija de diciembre. Que no te pega nada, Tormento. Pero si juraría que por tus venas corre sangre un grado o dos más caliente que la del resto.
Y otra cosa: yo estoy segura de que sí sabe y se entera. Los jodidos, en estas cosas, necesariamente son dos. Aunque unos se den más cuenta que otros. O lo digan más que otros.
Vaya marcha le has dado al blog en los últimos tiempo. Y yo sin enterarme. A ver si me pongo al día.
Un capazo de besos, guapa!
VIAJERA, cinco semanas son palabras mayores. Es una barbaridad que superarás con nota, pero eso sí que es un buen tormento!!
Cuídate y sobre todo, distráete y haz vida social. La camiseta ni la mires!
Un beso grande.
JARDINERA, entenderse no es fácil, pero cuando lo consigues genera un bienestar importante.
Cuídate y no hagas tonterías.
Un beso.
DELIRIUM, esto de exprimir la vida ya me empieza a tocar los calandracos, sabes?
Ganitas tengo de ver mi vida medio asentada, que me va a llegar la jubilación y estamos en destino provisional, joer.
Un beso, y cuídate mucho.
PAU, mi temperatura corporal en estado de reposo es de 35 a 35,5 grados, y sé que te puede extrañar por mi temperamento, pero el dato es el dato. Palabra.
Curiosamente, en verano me jodo de calor y en invierno me pasmo de frío... si tienes alguna teoría que lo explique, te quedaré eternamente agradecida :)
Un beso.
LAGARTO, tampoco es que las cervezas me duren tanto como para que se calienten.
Tiendo al trago largo :)
Un beso bien positivo.
ANTI, sé que me entiendes.
Cuando digo que no se entera me refiero a que no viene a leer, así que de mis pajas mentales está voluntariamente al margen, cosa que no sólo no reprocho sino que me parece estupendo para sentirme libre como un pájaro.
Luego viene una vez al semestre y se atraca. Pero es a toro pasado, para lo bueno y para lo malo.
Para lo de la temperatura, permíteme que te remita al comentario que le he hecho a Pau. Si confundimos el culo con las témporas, acabaré teniendo fama de loba.
Que no es que no me la gane...
Cuídate mucho, ya te queda menos.
Un beso.
DESTINO PROVISIONAL?????¿¿¿¿¿ Joder, ya me gustaría verte por aquí¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Que te salga todo bonito, y fé... se que no la pierdes, y sí, yo tb estoy hasta los cojones de exprimir la vida, sobre todo porque tenemos master, que no nos quedó otro remedio que exprimirla desde pequeñas... Pero bueno, ya sabes, la puta escuela y eso... que de algo sirve, coño¡
BESOSGORDOS, GUAPA¡
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