Enseñar


Las caras de las madres son, claro, un aleluya indisimulado.
Empezó el colegio, y por tanto, la calma, la rutina, el cafelito después de aparcar a las criaturas.
No hay día en el que me sienta más importante que cuando libero a veintisiete familias de su "tormento" particular.
Sabrá la gente que existen los condones? Por qué les estorban, si son hijos suyos? No ven que esos niños son, en grandísima parte, producto de sus desvelos, disposición, esclavitud, incapacidad de dejarlos crecer y madurar, incapacidad de marcar límites que les ayuden a de-li-mi-tar su campo de actuación?
Cuesta horrores hacer entender que un hijo no es un brazo. Es independiente del propio ser, por muy hijo y por muy bien parido que haya sido. Individuos. El propio nombre lo indica... o eso creo yo.
Lo peor de mis niños son sus padres.


De puertas para adentro lo curioso es ver cómo, tras casi tres meses de no-vida académica, te reencuentras con tus veintipico y alguno nuevo (dos, de momento) y se mantienen los hábitos, conservados hasta el punto de que, a pesar de que es el primer día, curran todos como si estuviéramos en pleno febrero...
Yo no necesito recordar continuamente una norma, no me desespero porque hacen lo que quieren, básicamente porque hacen lo que quiero yo.
Y yo que había programado un día light me veo haciendo dictados improvisados y largas operaciones matemáticas para repasar... porque piden más!!!
Nada de contar qué han hecho en vacaciones. NO!! quieren currar!!
La diferencia es que han crecido y están algo más morenos.
Contentos, risueños, expectantes...

Adoro mi trabajo. Me regala sus caras y sus cerebros en crecimiento, aprovechando, sorbiendo, vampirizando conocimiento, desbordando curiosidad... no podemos pedir más.

El presidente de mi tribunal de oposiciones me sugirió (nada amablemente, por cierto, fue grosero, chulo y patán como sólo un maestrillo frustrado puede serlo) me sugirió, decía, que dejara la profesión... que me cuestionara mi vocación, que quizá debería dedicarme a otra cosa.

Sólo se me ocurre la alternativa de puta de lujo, pero me pilla vieja y gorda, contestona y malhablada, los tacones me aprietan cada día más, y me siento más cómoda en delantal que con escote palabra de honor. No he sabido nunca poner cara de viciosa ni coquetear con la melena (eso debe ser porque no la tengo) y tampoco me ha hecho falta, la verdad.
Igual es que tengo cerebro y poco miedo a nada.
Así que lo lamento. Soy maestra y LO DISFRUTO como loca.

Y me quito el disfraz de maestra para llegar a casa, ponerme el de reina madre y escuchar el primer día de cole/instituto de mis princesas.
Y me reitero una y mil, y mil millones de veces, en que no hay nada más maravilloso que dejar espacio para crecer, para moverse, contemplar cómo construyen su vida, su entorno, sus esquemas de conocimiento, sus hábitos, sus manías.
Dejar respirar y a la vez no permitir que el exceso de aire les ahogue... ahí está el difícil equilibrio que diferencia la educación del adoctrinamiento, del aborregamiento y de la nefasta sobreprotección...
Echar a la calle ciudadanos del mundo, y no del barrio, o de la ciudad, o del país determinado y determinante.
No hijos de padres que se sienten culpables y por ello se someten.
Carne de psicólogo.
Exigir espíritu crítico, compañerismo, sentido de la justicia, tolerancia, pero no para todo ni en cualquier caso. Aplicar sentido común.

A mí no me parece difícil, aunque sí es cierto que agota física y mentalmente.
El secreto está en hacerlo con mucho amor.

Y no, de mi libro no sé nada.
Si esto le llega a pasar a Paco Umbral, que dios tenga en su gloria, se monta un pitote formidable. Como yo no soy Paco Umbral (aunque también me gustan las bufandas/chales/pasminas y demás lienzos) sólo os puedo remitir a la Casa del Libro, que es el único sitio donde las malas lenguas dicen que se puede encontrar.


15 comentarios:

Miss.Burton dijo...

Acabo de venir de vacas, mañana o en cuanto pueda me pongo las pilas y te leo tranquila, que ahora estoy cansada.
Un beso fuerte, veo que te ha sentado bien la vuelta... Ay, esos padresdecole... qué degenerados son casi todos.... ( si te digo que voy a pagar la ruta de vuelta a casa por no verlos... salud mental, tu me comprendes... ). Vamos que me quito de fumar si hace falta para la puta ruta...
MUAAAAAAAAAAA¡¡¡¡¡
Es jodido tener cerebro... se llega demasiado lejos... y se desea muchas veces esa bendita ignorancia que tan felices les hace a los que carecen de el...

Cósimo dijo...

Bienaventurados los maestros con vocación... y usted la tiene a raudales. Curiosamente, tengo una cuñada en similar situación, adora su trabajo, a pesar de esa pequeña tribu de tres y cuatro años... un día me pidió que la ayudara con la orla de fin de curso, uno a uno les hice sus fotos... y la verdad, sería alguno un trasto, pero me parecieron todos encantadores...


Pues qué le diré, que la Casa del Libro me queda un poco lejos... esperaré a hacer un pedido internáuticamente.

hippie pirata dijo...

Lo de gorda no cuela, por lo menos a mí.
Y el resto... nada, que es muy fácil, pan comido... sentido común y ya está.
La leche!
Menos mal que no soy maestro.

Ana dijo...

DELI, mucho me temo que no tener cerebro es mucho más jodido.

Hace algún tiempo envidiaba la ignorancia de algunos. Hoy la compadezco.
Y ven cuando quieras, hermosa.
Un beso.

CÓSIMO, son encantadores, se lo aseguro. Aunque a veces entran ganas de ajusticiarlos, claro ;)
Respecto al libro, la verdad es que he perdido el interés... quizá sólo le haga un favor a la editorial (de alguna manera habrá que llamarle a "eso").
Un beso :)

PAU, sentido común también es sinónimo de prudencia, así que no seas modesto, que tú gastas king size de eso, majo!!
Un beso :)

NoSurrender dijo...

Vaya padres más egoístas, sí. Que están deseando que empiece el cole de sus hijos para poder disfrutar sin problemas de sus jornadas de catorce horas de trabajo :P

Tienes uno de los trabajos más dignos e importantes de la sociedad, Tormento. Y con mejores vacaciones :P

Besos!

AnA dijo...

Maestra, dígame. ¿le ha dicho usted a sus alumnos de su pasión por el relato y su coherencia con el mundo?
Deben estar con usted : EMBOBADOS
BESOS!!!
Max está linkeado en mi blog!!! es Lovely Max

Luna dijo...

Creo que hoy día no sabría ser mamá y lo digo por los límites para delimitar.
Ser hijo, es, en la sociedad actual, un gran problema...
Todavía recuerdo las negociacones con mi madre para llegar un cuarto de hora más tarde a casa...

Yo no podría ser maestra,por eso os admiro tanto.

Felicidades al que cumple el día dieciocho.

Besos

Ana dijo...

LAGARTO, eres capullete.
La realidad que vivo yo es que el bar de enfrente de mi cole hace su agosto en septiembre y hasta junio, y en verano no se come un torrao.
Será que la vida está mu achuchá, que no tienen pa libros, pero los carajillos vuelan que es un contento, que lo sepas.

Y sí, es una profesión potente, algo vilipendiada por algunos, pero MOLA.
Agotadora. Necesitamos muchas más vacaciones, psicoterapeuta gratis y mulato subvencionado. Y no es broma!!
(el que no llora, no mama, que lo sepas :P)
Un besooo

ANITA de mis entrepaños, de mi pasión por el relato hablo con ellos, y ellos están aprendiendo a relatar con ganas, me gustaría poder publicar algunas cositas, pero no puede ser.
De coherencia no hablo... mucho me temo que no es tanta como tú crees, y además a ellos esa palabra seguro que les suena a sexo!! Están como pavitos reales, hija! Ni embobados ni nada, sólo babeantes, y por otras razones :P
Cuídate, y ahora voy a ver a MAX.
Un beso, linda.

Pues yo creo que eres maestra, LUNA. Hay mucho alumnado no matriculado suelto por ahí, que lo sepas.

Sobre lo de ser madre, creo que no hay grandes diferencias, excepto que hoy, además de madres, queremos ser más, queremos derribar muros, tópicos, prejuicios... nos tenemos que multiplicar, pero no dejamos de ser madres, y no creo que lo básico haya cambiado mucho, la verdad.
Felicidades al del día dieciocho, sí :)
Un besote.

Jaime dijo...

K puedo decir. No tuve demasiados maestros con vocación, así que me joderé y envidiaré a tus alumnos... ya estoy tan mayor que casi no soporto que me enseñen. Aunque tú lo haces no poco amenudo a pesar del par de kilómetros.

Te dejo, que tengo mucho que dejar para mañana.

d2 dijo...

Totalmente seguro que fuera de tu intención, pero hoy has conseguido que me replantee mis convicciones sobre los profesores, no todos claro, el presidente de tu tribunal sigue siendo el modelo de mas éxito, pero leerte es realmente reconfortante. Me encanta tu facilidad para comunicar. Gracias, es una gozada leerte.

Ana dijo...

JAIME, querido, yo lo más que te enseño son los dientes :)

Déjate enseñar, tonto. Y no dejes que te aburran... parte de la culpa es de que los alumnos no saben que cobramos por enseñar... y simplemente se dejan caer en la silla a esperar que suene la sirena.

Que besos, mon amour.

DE2, no consigo olvidar el careto de camionero gordo y putero del tipo aquel... dentro de un tiempo, lo incluiré en mi próximo libro, que venderé en los mercadillos de las principales capitales europeas a bajo precio, que irá en CD, pdf, ABS y todo ello :)

Da gusto, con estos comentaristas recupera una las ganas de escribir.
Gracias, hermoso.
Un beso.

UnaExcusa dijo...

Qué ganitas de aplaudir cuando te leo así.

Cósimo dijo...

Hola,

Pues ya puestos le he dado a usted un premio al esfuerzo personal, y creo que muy merecido.

Saludos!.

Miss.Burton dijo...

Supongo que se lleva en la sangre, hacer las cosas bien, ser legal... tu lo eres, hubieras elegido la profesión que hubieras elegido, se que te hubieses dejado los cuernos igual... Pero encima lo echas todo, te lo curras, y se que al otro lado esos niños lo huelen, porque ahora ya no son tan tontos, y ven a kilómetros la que vale y se entrega, y la que no, que se la pasan por el forro.
Dedicación, la tuya. Tu blog. Tu trabajo. Todo a saco, todo en vena. No hace falta que digas nada mas, eres un maquinón. Y sí, se nota que disfrutas con tu trabajo, y eso es enorme, si uno vive de acuerdo con su cabeza.. y se mantiene, pues eso, se queda cmo tu, tan contenta consigo misma.
Bueno, me piro que me pongo en plan Laura Ingels y quedo de culo... de cursi..
Un besazo, y cuidadín cn los piojos, tía, ya llegaron a los colegios, aggggggggggggggggggg¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Estoy hasta los cojones de los padres cerdos que no miran la puta cabeza a sus hijos, y luego nos lo pegan, avisada quedas, yo ya estoy en cuarentena....
Te dejo que no acabo.

Vintage dijo...

Y como me gusta a mi, q te guste tu profesión pq gracias a los q amáis la enseñanza, mi hija viene cada día con una sonrisa en la boca, pq su seño se la pinta cada día
Y mi hija no me estorba, mi hija me hace ser mejor persona, mi hija es un ser individual, creativa, llena de vida.
Y yo la educo como mejor sé, y confio en que sus señoritas le enseñen lo que ellas mejor saben
Pq tengo la suerte de q mi hija esté con señoritas q les encanta su trabajo.

GRACIAS WAPA, por fi díme q libro es anda

Muakkkkkkkkkkkkkkkkkkkkk